¡BIENVENIDOS A ESTE RING!

Tomen asiento, señoras y señores. ¡Bienvenidos a este ring! Griten, animen, protesten, expresen, alienten, inciten, espoleen, vociferen, pinchen, empujen, abucheen, aclamen, comenten, reivindiquen, pateleen, piten, abronquen, reprochen, aplaudan... ¡Esto es pasión por la literatura!

martes, 23 de mayo de 2017

97º ASALTO: VOLVER A EMPEZAR (Ganador semanal en Relatos en Cadena)

foto tomada de la web

VOLVER A EMPEZAR
El crujir de las hojas les recuerda lo solos que están. La vegetación se ha ido extendiendo por el asfalto hasta sepultar por completo la Quinta Avenida y el Madison Square Garden. Ahora los animales campan a sus anchas por Central Park, mientras ellos pasean de la mano, completamente desnudos, sin ningún pudor, bajo la sombra de los árboles. Nunca han sido tan felices. Al fondo, como últimos vestigios del pasado, las siluetas de los rascacielos medio derruidos alertan de la historia. Por eso, cuando esa maldita serpiente vuelve aparecer bajo sus pies, ella, sin temor alguno, la coge con sus propias manos y la parte en dos.

Muy feliz de volver a aparecer por el Concurso " Relatos en Cadena" de la Ser. Hubo un poquitín de emoción (y de suerte) y logré pasar a la final mensual. Aquí podéis votar por el relato que más os guste del mes de abril, en la web de la escuela de escritores, donde además de "Volver a empezar", también están "Evolución natural", de Javier Regalado, "Por mí y por todos mis compañeros!", de mi buen amigo Manuel Menéndez y "Al siguiente intento", de Álvaro Abad.


Para votar: 

jueves, 18 de mayo de 2017

96º ASALTO: EL DE LA VERGÜENZA (incluido en Deantología)

EL DE LA VERGUENZA
Los canapés fueron desapareciendo de la bandeja, hasta que sólo quedó uno. La conversación variaba de un tema a otro, sobrevolando siempre por encima del dichoso canapé, sin que nadie se atreviese a cogerlo. Venga, comeos el último, alentaba el anfitrión. Cómetelo tú, no, tómatelo tú, que yo no puedo más. Yo estoy lleno, decía un invitado. Y yo, repetía como el eco otro, y otro, y otro. Más de uno giraba la cabeza y lo miraba con gula, pero si algo sobraba en esa mesa era educación y así el triste canapé permanecía intacto, mientras la velada llegaba a su fin. ¿Os ayudamos? Los invitados, y sus abrigos, se marchaban y los anfitriones recogían. No os preocupéis, si no tardamos nada. Besos. Abrazos. Hasta la próxima. Todo estaba delicioso. Y así el canapé, revenido y frío, acababa sus días en una bolsa de basura. Será después, ya de noche, cuando un hombre al que los palos que da la vida le han quitado cualquier tipo de pudor, rebuscando entre los desperdicios de los contenedores algo que llevarse a la boca, encuentre el último canapé, ese que todos llaman el de la vergüenza.


¡Cómo pasa el tiempo! Este es uno de los dos micros que me incluyeron en "Deantología: la logia del microrrelato" hace 4 añitos: 138 relatos de 69 autores diferentes, recopilados por Manu Espada y Rosana Alonso, en un recorrido por la mayoría de los blog de microrrelatos.

Deantologia: la logia del microrrelato (Talentura Libros, 2013).  Más sobre Deantologia: la logía del microrrelato en: