ART. 47.7
Y un día prohibieron hacer el amor.
Argumentaron que, como la reproducción de nuestra especie estaba
totalmente garantizada por los avances científicos, ya no sería
necesario ensuciar nuestros cuerpos con actos impuros. Al principio
desafiamos la ley y hacíamos el amor en privado, hasta que comenzó la
represión. Entraban de noche en las casas de todos los que éramos
sospechosos de infligir el artículo 47.7, con la intención de
sorprendernos in fraganti. Rompieron cristales. Derribaron puertas. Nos
fotografiaban desnudos y nos sacaban a rastras de las habitaciones. Se
nos acusó de pervertidos, de inmorales, de revolucionarios. Empezaron
las delaciones y los interrogatorios, los procesos, las castraciones,las
ablaciones. Pronto se prohibieron las caricias, los besos, las miradas.
Para entonces muchos ya habíamos decidido huir de las ciudades y cada
noche hacíamos el amor en los baños de los aeropuertos abandonados, en
los coches de los desguaces, en las barcas encalladas de las playas, en
los cobertizos de las granjas derruidas que encontramos camino hasta
aquí, donde todos vosotros habéis nacido, donde podréis seguir amándoos
en libertad.
Art. 47.7 ha sido seleccionado este mes en La microbibilioteca en la categoria de castellano, en compañia de "Finlandia", de Fran Rubio Consuegra, "Los Alvarado", de Mar Horno y "El descanso", de Placido Romero. El ganador mensual fue Eduardo Iáñez con "La Tarde en la frontera".
En catalan la ganadora fue "Caché" de Cristina Garcia y los seleccionados, Nicolas Jarque y sus "Francotiradors" y "El far" de M.Carme Marí.
BRAVO. El amor como enemigo de los perversos.
ResponderEliminarDesolador de tan bien como lo has escrito.
ResponderEliminarUn abrazo de enhorabuena.
Pues entonces, disfrutemos de la libertad que aún conservamos. Un placer compartir febrero contigo. Me ha gustado mucho esos lugares donde los amantes se esconden: aeropuertos, desguaces, barcos encallados... Precioso. Un abrazo.
ResponderEliminarMuy buen texto donde nos alertas acerca del peligro que sufren nuestras libertades individuales y el que supone un estado totalitario. Tus micros siempre dando en el clavo. Enhorabuena. Gloria Arcos
ResponderEliminar